Los tapones de corcho natural: Mártires y Santos

Una experiencia insólita

Durante una estancia en Madrid, visité un restaurante muy bien considerado por sus platos típicos. Pedí unos callos a la madrileña y, de entrante, unas anchoas.

Para beber, solicité un vino de la zona insistiendo en que tuviera tapón de corcho natural.

—Algunas veces los clientes me piden el tapón pero que sea de corcho natural es usted el primero. Le voy a traer un vino de una bodega de Navalcarnero. —me dijo el camarero.

Me trajo la botella de vino y los entrantes. Descorchó la botella y me sirvió un poco de vino en la copa.

—¿Le gusta?

—Sí, es un buen vino, déjeme el tapón, quiero verlo.

Mientras tomaba los entrantes y bebía un poco, giraba el tapón entre mis dedos, observando su aspecto físico, su suavidad al tacto y su olor impregnado de vino.

De repente, oí una voz:

—Muchas gracias.

Miré alrededor, sorprendido, buscando quién me hablaba. No vi a nadie, pero la voz continuó:

—Soy yo, el tapón. Muchas gracias.

 

No salía de mi asombro, el tapón me hablaba. Respiré hondo y le pregunté:

—¿Por qué me das las gracias?

—Has pedido verme y me has tratado con respeto. Además, ¡te ha gustado el vino! Siento que mi misión está cumplida y puedo quedarme tranquilo con el trabajo que he hecho.

La función del Tapón de Corcho

—¿Cuál es el trabajo que has realizado?

—Mi trabajo consistía en cerrar esta botella de vino y ceder aire en pequeñas cantidades para que se produzcan unas reacciones químicas que mejoran el vino. Es lo que algunos llaman “bouquet”. Claro que no solo depende de mí, sino también del bodeguero. Él ha hecho su trabajo y yo el mío.

El Origen del Corcho

—¿De dónde vienes? ¿Quiénes son tus padres?

—Mi padre es el alcornoque. El corcho es su corteza, que se regenera tras ser extraída. Ha sido el hombre quien ha cortado el corcho y me ha dado la forma cilíndrica.

—He visto que algunas botellas tienen tapones de otros productos distintos al corcho y de corcho triturado.

—Sí, pero no son corcho natural. Todos esos tapones nos imitan, dibujan los poros del corcho natural en su superficie para que el consumidor los confunda con corcho natural; otros dibujan muchas barras para tapar su superficie; otros dicen que son “ El corcho reinventado”. Intentan imitarnos pero nunca lograrán el mismo resultado. Nosotros, los tapones de corcho natural, somos insustituibles en los vinos de calidad.

 

 

—¿Tienes amistad con otros tipos de tapones?

—No mucho, nos critican y nos achacan todos los males. Los tapones de corcho natural nos dedicamos a mejorar el vino en la botella, por eso los otros tapones saben que no pueden competir con nosotros. Dicen que para los vinos de consumo del año cualquier tapón sirve, pero eso no es cierto. Desde el primer momento en que nos colocan en la botella, empezamos a actuar mejorando el vino lentamente.

—Pero muy pocos lo conocen.

—Si el tapón de corcho natural mejora la calidad del vino y el corcho se obtiene del alcornoque. Entonces el alcornoque es un árbol que hay que proteger y mantener. Sin él no hay corcho, y sin corcho, no disfrutaríamos de un buen vino.

—Así es… Pero lo que está sucediendo es todo lo contrario, le voy a contar algo…

—Espera, espera, te vienes conmigo y cuando lleguemos a mi casa seguimos hablando. Así puedo tomarme los callos tranquilamente que si no se me van a enfriar.

—Sí, me gusta su invitación, ¡que aproveche!.